Hace muuuuucho tiempo que no nos veíamos por aquí... Espero de corazón que os encontréis todos bien.
Han sido meses de subidas y bajadas, de mucha conexión y de total des-conexión con las redes y con el mundo en general. Momentos preciosos y momentos muy tristes. Pero parece que va saliendo el sol y ya sabéis que a nosotros el sol...
Volvemos y lo hacemos con mucha alegría y con muchas ideas rebonitas para cuchamandear juntos.
Hoy os traemos una propuesta fantástica que acabamos de incorporar en nuestra "madriguera", UN ARENERO.
Hace mucho tiempo que vengo dándole vueltas a la fabricación de uno, ya que mis dos cuchamanderos disfrutan muchísimo jugando con la arena, les encanta su tacto, observar como fluye la arena entre los dedos y el cacharrear con ella es un juego al que siempre están dispuestos a jugar.
En la madriguera teníamos un espacio perfecto para ello, sol de mañana y sombra de tarde.
No se hable más ¡¡a excavar!!
La implicación de los peques ha sido total desde el comienzo, y eso hace que ese espacio sea aun más propio.
Nuestro arenero es de 3m x 1,5m y de profundidad quitamos 25 cm. Es un trabajo laborioso, pero si lo hacéis todos juntos seguro que hay un montón de risas y alguna que otra anécdota.
Una vez retirada la tierra, colocamos sobre la superficie una malla anti hierbas o algún toldo o malla que tengáis por ahí guardada.
Una vez colocada se comienza a rellenar con arena. Una vez más la colaboración cuchamandera es vital.
Hay muchísimos tipos de arena, mas fina o más gruesa. Nosotros hemos empleado arena lavada, tiene algo de gravilla, pero nuestro presupuesto era el que era y necesitábamos mucha arena...
La arena de arenero la podéis comprar en Leroy merlín en la sección de materiales de construcción. O en cualquier empresa que se dedique a ello.
Tenéis que tener en cuenta que cada metro cubico de arena son 1600 kg, así podréis calcular cuantos sacos necesitáis.
Los formatos disponibles suelen sacos de 25 kg, aunque algunas tiendas trabajan con sacos mas grandes.
Para acotar el arenero nosotros hemos utilizado unas piedras que teníamos y las hemos fijado al suelo con cemento, para evitar movimientos no deseados.
En el mercado tenéis muchos tipos de cercado que pueden adaptarse a vuestras necesidades. Echad un ojo.
Y ahora ya solo queda ¡¡CUCHAMANDEAR MUCHO!!